Oxidación de tuberías de calefacción.

INTRODUCCIÓN. El uso de hierro o acero galvanizado en tuberías, sigue siendo habitual en obras de construcción dado su bajo coste. Es un material noble que admite un buen reciclado posterior y que ofrece unas buenas prestaciones durante su vida útil.

Su puesta en obra debe cumplir con las normas del buen hacer constructivo, por lo que se le deben aplicar una imprimación antioxidante y dos capas de pintura al esmalte sobre metal que lo protejan. Además se debe repintar periódicamente al objeto de garantizar su durabilidad sin pérdida de prestaciones.
El color de la pintura debe permitir saber su uso.

Oxidación de tuberías.

DESCRIPCIÓN. Tuberías de conducción de agua, encoquilladas en vez de pintadas, tras tres años de puesta en obra. Su alto grado de oxidación hace necesario una intervención inmediata.

JUICIO TÉCNICO. Ocultar no arregla el problema. La conocida frase de los constructores de "tapa, tapa  para que no se vea" no sirve en este caso. Al colocar la coquilla, lo único que se ha conseguido es favorecer la condensación superficial sobre las tuberías y disminuir la evaporación de la humedad condensada sobre las mismas. Como resultado se obtiene una mayor velocidad de oxidación y una más rápida degradación del material.
Las tuberías deben ir aisladas, (encoquilladas) tanto las que transporten líquidos fríos como calientes, por distintos motivos, pero eso no elude su protección antioxidante.

REPARACIÓN PROPUESTA.

• Desmontaje de la coquilla.
• Lijado de la superficie oxidada.
• Aplicación de una pintura pasivizadora.
• Aplicación de dos manos ( primera, lijado y segunda ) de pintura de protección.
• Recolocación de las coquillas.